viernes, 20 de julio de 2007

PotterPotterPotter

Mmm... como conocí a Potter, tenía 15 años, era el año 2001, el primer semestre... me estaba empezando a aburrir de leer debido a la "impresionante" selección de textos escolares del colegio Católico retrógrado en el que me encontraba, cuando vi a una compañera que sostenía un libro de 425 páginas (claro que ese momento para mí sólo era un libro muy gordo) con una portada de un dibujo de un niño sonriente de lentes sosteniendo un huevo dorado con un palito en la mano...

Me llamó la atención, igual es raro ver a alguien en la edad del escepticismo leyendo semjante ladrillo en pleno recreo... así que me acerqué a ella y le pregunté que leía... ella me respondió "Harry Potter" y me contó la historia de manera muy, muy general... por alguna extraña razón, luego de tan escueta trama me llamó la atención y pedí que me lo prestara cuando lo terminara... y ella me dijo que no, porque ese era el 4° libro, que si quería, me prestaba el 1°, dándome el título, para que fuera en orden...

No me lo prestó, pero, extrañamente, en vez de olvidarme del asunto, el nombre del libro se grabó en mi cabeza a fuego, y al no encontrarlo en la biblioteca del colegio, hice algo que nunca había hecho antes: le pedí el libro a mi mamá

En las vacaciones de invierno, como siempre hasta hoy, fui a visitar a mi papá, y cuando volví a Concepción mi santa madre me había comprado el primer tomo y lo había dejado sobre mi cama, cuando lo tomé ella dijo riendo "para que dejes molestar", al parecer había hinchado mucho para obtenerlo.

Me demoré dos semanas en leerlo, coincidiendo con los primeros dias de clases y mi mamá incluso tuvo que esconderlo (mamá, hora de la confesión: siempre supe donde lo escondías)... me gustó, muchísimo... pero aún no me encantaba...

Después le presté el libro a otra compañera, que lo amó y se compró el segundo tomo en seguida, luego de leerlo en tiempo record, me lo prestó, también me gustó mucho, se veía venir que era bueno, pero sabía que faltaba más...

Esa misma compañera se compró el tercer tomo: con ese tuvimos historia, lo leímos casi al mismo tiempo, el mismo libro, teniendo, incluso, algunos percances con nuestra profesora de inglés que nos lo quitó por estarlo leyendo en clases... luego nos lo devolvió, con la correspondiende perorata y un por lo bajo "a mi también me gusta Harry potter"... La tercera entrega fué la que me cautivó, tantos detalles, cosas impresionantes, que uno ni siquiera había tomado en cuenta... esa J.K Rowling era una Genio!!!

En diciembre de ese mismo año la compañera que me presentó a Harry me prestó su copia del "libro gordo", el mismo que me habia llamado la atención meses atrás, justo después de los exámenes, "para que no te distráigas antes" me dijo... Aún estoy orgullosa de esa vez... 425 páginas leídas en 48 horas, en mi casa estaban impresionados... nunca me habían visto tanto tiempo quieta y callada, ni si quiera me detenía para comer.

Ese año se estrenaría la primera película, de la que yo me enteré de su grabación mientras leía el tercer tomo, pero esa es otra historia...

Durante los años siguientes me enamoré del mundo de Harry Potter, conocí páginas en internet (una de las cuales hoy es la mayor fuente hispana del tema) y comenzó a salir el merchansdising... yo lo compraba, a pesar de las burlas de mis compañeros por ya estar muy grande, mis compañeras de antes ya habían abandonado a Potter...

Cuando entré a la Universidad, en las vacaciones de invierno salió el quinto tomo, no podía esperarlo en español. TENIA que leerlo!!! lo busqué en internet y descubrí que no era la única ansiosa, otros fans, con mucho mejor nivel de inglés que el mío, ya lo habían tradcido... y lo leí en internet (lo mismo con el 6° libro, un año más tarde).

Pero en el mundo real seguía sin tener gente acorde a mis gustos, y el 2005 luego de mi única ida al cine sola en mi vida, para ver la cuarta película, conocí a mis "amiguis" del alma, los que se transformarían en mis ñoños mágicos... a los que seríamos los fundadores de la SPC... claro en manos de otra comunidad, la cual agradezco haber conocido, o si no, seguría en mi soledad Potteriana...

Bueno, el resto ya lo conocen, o tal vez ya me da lata seguir escribiendo, lo único, hoy se lanzó el séptimo libro en todo el mundo en inglés, la saga ya está completa, ha tomado más de 6 años de mi vida, una obsesión hermosa y que me ha hecho conocer a muchos (no todos, debo aclarar) de mis amigos mas fieles de mi vida... y eso es algo que no todos los escritores pueden decir... que les cambiaron la vida a sus lectores...

Y nada, es la nostalgia, de ver que en unos días ya sabré el final, que ya nunca más habrá espera, que si hay especulaciones, esta vez serán eternas, sin el alivio de pensar "en el próximo libro sabremos la respuesta"... luego de 6 años, ya no hay más...

Y como dicen los ingleses antes del clímax de la historia

"This is it"

Natty

sábado, 7 de julio de 2007

Wicked Wisdom

Mi amiga Escarlata puede ser una mujer cruel, femme fatal cuando se lo propone, coqueta, infantil, hiperactiva, sin racionamiento bajo presión y todo lo que quieran, (algunas de las acepciones incluso las apoyo :P) pero es una persona muy, pero muy sabia…

A veces no puedo creer que tenga casi la misma edad que mi hermana mayor, porque de repente se ve muy madura y otras se parece a mi sobrina… pero es tema para otra entrada…

Estuvimos conversando de la vida hace poco (hecho que cada vez se nos hace más raro, debido a mi falta de tiempo ya sabida) cuando le pedí su opinión sobre mis últimas actitudes frente a la vida y la gente…

Mi amiga Escarlata no suele darme razones ni argumentos para explicarme su punto de vista, a diferencia mía, que siempre le estoy dando para absolutamente todo, cosa que estoy completamente segura que le desespera, aunque no me diga nada al respecto… se le nota con mirarla.

Luego de haberme retado por haberle pedido razón a altas horas de la noche y de darme un par de frases que en realidad no dijeron nada… le bastó una sola oración para que me replanteara toda mi visión nueva con el mundo…

Ok, no todo, pero si una parte de lo que estaba viviendo en el momento… es increíble como la sencilla frase “lo que yo he aprendido…” te puede replantear todo por completo, es decir, con oraciones de ese tipo tiende a escuchar más, porque, mal que mal, tiene la experiencia de por medio para hablar.

Ahí es cuando uno se da cuenta que todas las personas tienen su cuota de sabiduría, incluso las que uno menos se espera, aunque, por el lado de ella, supongo que el hecho de haberle pedido su opinión es validar su sabiduría, o por lo menos, los casi 3 años de experiencia extra que tiene sobre mi…

Supongo que a mi edad eso se puede considerar como muchísima sabiduría… o debe ser la hora en la que escribo.

Natty

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